Con un enfoque innovador, el Vaticano propone para esta próxima edición de la Bienal de Venecia (20 de abril – 24 de noviembre) una exposición multimedia con varias sorpresas. Desde su debut en 2013, el Vaticano ha marcado presencia en la Bienal. Esta vez, en un hecho sin precedentes, el Papa Francisco visitará la exposición internacional.
En conferencia de prensa se dio a conocer la propuesta curatorial, que se desarrollará tanto en el pabellón vaticano como extramuros. La histórica cárcel de mujeres de Venecia, en la isla de Giudecca, será utilizada por primera vez en este contexto. Titulada “Con mis propios ojos”, la muestra recibirá la contribución de 80 reclusas, que no solo harán de guías, sino que participarán a través de poemas, fotografías y una actuación en un cortometraje de 12 minutos dirigido por los reconocidos Zoe Saldaña y Marco Perego.
Fachada de la cárcel de mujeres en la isla de Giudecca. Cortesía
Giudecca, llamada Spinalonga por los venecianos debido a su forma alargada, es una isla situada al sur del centro histórico de Venecia. Es un área mayoritariamente residencial, con una hermosa vista de San Marcos. Se puede llegar a ella con una sola parada del vaporetto, cruzando el canal de Giudecca. A lo largo de los cimientos frente a este canal, se encuentran las iglesias más bellas de la isla, todas diseñadas por Andrea Palladio.
En la conferencia de prensa también se informó que Maurizio Cattelan –artista célebre por sus provocativas obras conceptuales como el “inodoro de oro” y Comediante (2019), que consistía en una banana adherida con cinta adhesiva a una pared– ha sido elegido para crear una imponente obra en la fachada del espacio expositivo vaticano. El encargo adquiere una dimensión irónicamente significativa cuando se recuerda la polémica obra expuesta por Cattelan en la Bienal de 2001: La nona ora (La novena hora), de 1999, representación en resina del Papa Juan Pablo II tras ser impactado por un meteorito.
Maurizio Cattelan, La nona ora, 1999, en Blenheim Palace, Inglaterra, 2019 © Leon Neal/Getty Images/Hyperallergic
El Cardenal José Tolentino de Mendonça, al frente del Dicasterio para la Cultura y la Educación del Vaticano, reflexionó sobre esta inclusión afirmando: “Las preguntas que inicialmente podemos percibir como radicales pueden ser, en realidad, vías para redefinir la visión de lo sagrado, enmarcándose en el diálogo de la Iglesia con el arte”. El título de la muestra se explica por la convicción de Mendonça de que “ver con los propios ojos” confiere un “estado único”, implicándonos de lleno en la realidad y transformándonos de meros espectadores en auténticos testigos.
Chiara Parisi, directora del Centro Pompidou-Metz, y Bruno Racine, expresidente de la Biblioteca Nacional de Francia, son los curadores de esta exposición, que incluirá también obras de Corita Kent, Sonia Gomes, Claire Fontaine, Bintou Dembélé, Simone Fattal y Claire Tabouret.
[Artículo elaborado con información proveída por Hyperallergic].