Inteligencia Artificial: de trampa académica a proceso creativo entre maestros y alumnos

La incorporación de la Inteligencia Artificial (IA) en el ámbito educativo ha generado un debate significativo en los últimos tiempos. Aunque se temía que la facilidad de acceso a estas herramientas pudiera propiciar la trampa académica entre los estudiantes, una reciente encuesta realizada por Quizlet ha revelado un giro sorprendente: los profesores están recurriendo a la IA generativa incluso más que los propios alumnos.

Un claro ejemplo de la integración efectiva de la IA en la educación es MagicSchool, una herramienta desarrollada por OpenAI específicamente para educadores de primaria y secundaria. Tim Ballaret, un maestro en el sur de Los Ángeles, ha utilizado MagicSchool para crear problemas matemáticos personalizados que se alinean con los intereses de sus estudiantes. Según su fundador, Adeel Khan, MagicSchool ya ha atraído a 150.000 usuarios, adaptando la tecnología de OpenAI para apoyar a los educadores mediante modelos de lenguaje alimentados con las mejores prácticas docentes y material de formación pedagógica.

MagicSchool ofrece una variedad de funciones, que incluyen la creación de hojas de trabajo y exámenes, ajustes en el nivel de lectura del material según las necesidades de cada alumno, la elaboración de programas educativos especializados y el asesoramiento sobre cómo abordar problemas de comportamiento estudiantil.

La IA no solo está cambiando el panorama para los educadores experimentados, sino también para aquellos que recién se inician en la tecnología. En este contexto, el AI Education Project, una organización sin fines de lucro apoyada por gigantes como Google, Intel y OpenAI, ha capacitado a más de 7,000 profesores en 2023 sobre el funcionamiento y aplicación de la IA en las aulas.

Joseph South, director de aprendizaje de la Sociedad Internacional para la Tecnología en la Educación, enfatiza que, a diferencia de otras modas tecnológicas pasajeras en el ámbito educativo, la IA llegó para quedarse. A su juicio, es preocupante que algunos educadores intenten mantenerse al margen de esta revolución tecnológica.

Finalmente, la Federación Americana de Profesores, a través de su presidenta Randi Weingarten, aboga por un uso de la tecnología que complemente, y no sustituya, al educador. Insiste en la importancia de regular estas herramientas para garantizar su precisión, equidad y accesibilidad, sugiriendo que la IA podría, en efecto, ser altamente beneficiosa para la comunidad educativa.

Este escenario refleja una transformación en la educación, donde la IA se presenta no solo como un desafío, sino también como una oportunidad significativa para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje.