Molino San Luis: Posiciones sobre la demolición del histórico edificio

Durante el fin de semana, trascendió la noticia del inicio de los trabajos de demolición del histórico Molino San Luis con el objetivo de construir en el sitio una estación de servicio, algo que ya había generado polémica en torno a la conservación del patrimonio histórico en la ciudad de Asunción a mediados de este año.

La demolición se ampara en una medida cautelar aprobada por el Tribunal de Cuentas del Poder Judicial en favor de la empresa que realiza los trabajos, que comenzaron a efectuarse el sábado, hecho que se viralizó de inmediato en redes sociales en forma de reclamos a diversas instituciones públicas, entre ellas la Secretaría Nacional de Cultura (SNC).

Un mensaje publicado por Federico Mora, jefe de gabinete de la Municipalidad de Asunción, en sus redes sociales, indica que “la demolición es en efecto a una medida cautelar que se emitió contra la resolución emitida por la cartera estatal (la SNC), que dispuso el paro de las obras en el edificio antiguo”.

A esta declaración respondió la SNC con un comunicado que alega que las obras de demolición del molino incurren en un  incumplimiento, ya que en julio pasado la  institución resolvió “declarar bien de valor patrimonial el inmueble y porque no habían sido comunicada sobre la medida cautelar”. Por esta razón, la SNC resolvió tomar las medidas  correspondientes de conformidad a lo establecido en la Ley de Protección Cultural.

En aquel entonces las intervenciones habían sido autorizadas por la Municipalidad de Asunción para la construcción de una estación de servicio en el sitio en el que se emplaza actualmente el antiguo molino. Posteriormente, las obras se detuvieron ante la discusión sobre la condición de patrimonio histórico de la edificación, lo cual culminó en la decisión de la Junta Municipal de Asunción de aprobar una declaración de patrimonio histórico del edificio y solicitar a la Municipalidad su inclusión en el denominado “Catálogo de edificios”.

En su comunicado, la SNC expresa: “Ante la falta grave incurrida, que atenta contra un bien cultural de la ciudad de Asunción, esta Secretaría de Estado tomará las medidas legales correspondientes de conformidad a lo establecido en la Ley 5621/16 ‘De Protección del Patrimonio Cultural’”. Y más adelante, agrega: “Así también, instamos a los gobiernos municipales a colaborar con la aplicación de las políticas culturales del país en sus territorios respectivos atendiendo a que los bienes culturales son testigos materiales de nuestra historia. Protegerlos es responsabilidad de todos los paraguayos”.

El edificio funcionaba como un antiguo almacén, molino de granos, centro de abastecimiento de productos de campo y venta de artículos varios. Se erguía en la avenida Artigas, por entonces uno de los primeros trayectos directos entre el centro capitalino, la estación de carga del ferrocarril y la salida de la ciudad.