Molino San Luis: debate en torno al patrimonio histórico en Asunción

La intención de demoler el histórico Molino San Luis con el objetivo de construir en el sitio una estación de servicio ha generado la previsible polémica en torno a la conservación del patrimonio histórico en la ciudad de Asunción.

Ante el inminente derrumbe del edificio, la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) exigió la suspensión de los trabajos de demolición del antiguo molino autorizada en principio por la Municipalidad de Asunción. La institución también solicitó a los propietarios que informen sobre las acciones realizadas, de conformidad a lo establecido en la Ley 5621/16 “De Protección del Patrimonio Cultural”.

Cabe recordar que esta normativa tiene como objeto proteger, salvaguardar, preservar, rescatar, restaurar y registrar los bienes culturales de todo el país, así como la promoción, difusión, estudio, investigación y acrecentamiento de tales bienes.

Si bien el edificio no está incluido en el catálogo de patrimonios históricos, la SNC recomienda su conservación. También hizo un llamado a las autoridades municipales para conformar una mesa de trabajo que pueda coordinar acciones y evitar casos como el que afecta actualmente al viejo molino, ubicado en las avenidas Artigas y General Santos.

El anuncio de la demolición despertó indignación en la ciudadanía, expresada particularmente en redes sociales.

De acuerdo con declaraciones de la comunicadora Gloria Torras, el Molino San Luis “no es un caserón viejo, no es un depósito en ruinas. Es un patrimonio declarado, un vivo testimonio de la historia de la ciudad, catalogado y protegido, bajo ley y resolución de patrimonio de la ciudad”.

En el pasado, el edificio funcionaba como un antiguo almacén, molino de granos, centro de abastecimiento de productos de campo y venta de artículos varios. Se erguía en la avenida Artigas, por entonces uno de los primeros trayectos directos entre el centro capitalino, la estación de carga del ferrocarril y la salida de la ciudad.