Juan Florenciáñez, la “revelación” de Oxígeno Feria de Arte 2021

Acaba de ganar dos premios en la cuarta edición de Oxígeno Feria de Arte, que clausuró el domingo pasado: el Open Borders, instituido por ArtePy, que lo habilita para una residencia de dos meses en Italia, tiempo durante el cual desarrollará un proyecto especial, y el BGN/Arte, que le permitirá realizar una exposición individual en la galería del mismo nombre el año próximo. Asimismo, una pieza suya fue adquirida por la Colección Mendonca para integrarla a su acervo de arte contemporáneo. Juan Florenciáñez, quien transita el mundo de las artes visuales y la moda, comparte aquí sus inquietudes y expectativas.

— ¿Cuándo comenzaste tus investigaciones visuales entorno a las problemáticas de la identidad y la diversidad sexual, y cómo se vinculan con otras disciplinas?

— Una vez, siendo estudiante de diseño, visité una muestra en el MALBA (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires). Vi una obra que no entendí mucho al principio, pero que me llamó la atención por sus colores y forma de presentación. Luego, al leer sobre ella, dimensioné las muchas posibilidades de decir algo que una obra abre. Y me dije “quiero hacer esto”. Entonces no sabía que se estudiaba artes visuales. Luego de un tiempo, ya en Paraguay, empecé la carrera en la FADA-UNA y fui adquiriendo conocimientos teóricos y distintas maneras de expresarme plásticamente. Mi producción visual incluye fotografía, instalación, collage digital y técnicas mixtas. Como me muevo en todas estas áreas, desde distintos lugares, voy encontrando disparadores para realizar mis trabajos. Las problemáticas LGTBIQ+ me atraviesan personalmente como miembro de la comunidad, pues viví en la adolescencia mucha discriminación y bullying.  Además, toco temas del feminismo. Crecí con tres mujeres, que son mis tías. Desde su lugar de empoderamiento pude vivenciar mucho lo que el patriarcado configuró para ellas, pese a ser todas mujeres profesionales. Es un tema amplio de debatir, pero son cuestiones que me interesan y que marcan mis producciones.

Juan Florenciáñez. Autorretrato 2, 2020. Collage digital. Cortesía

— ¿Qué lenguaje visual te hace sentir más cómodo? En la exploración de la propia imagen que aparece en tus obras hay un acto performático.

— A la hora de expresar algo busco el medio que mejor se adapte a lo que quiero decir y pienso mucho en el acabado visual que se acerque a mis expectativas. Con la fotografía y el collage puedo articular mucho de mis vivencias actuales, pero sigo explorando otros campos, como la instalación. La serie de collages que presenté a Oxígeno remite a una forma de crear mi entorno seguro, algo que siempre buscamos los miembros de la comunidad LGTBIQ+. A través de fotografías mías y materiales extraídos de libros de botánica y pintura, entre otros, puedo construir un mundo personal lleno de connotaciones, ya que cada animal o planta ahí puesto tiene un fin semiótico.

Juan Florenciáñez. Collage digital. Adquisición Colección Mendonca. Cortesía

— Fuiste la “revelación” de Oxígeno. ¿Cuáles son tus expectativas a partir de los premios que obtuviste?

— Ingresar a la Colección Mendonca es un gran logro para cualquier artista. Pertenecer a una colección de arte contemporáneo inscribe la obra en un acervo del cual forman parte artistas importantes de nuestro medio. Sobre la residencia en Italia, considero que es una oportunidad muy valiosa para cualqueir artista y, para mí, un gran compromiso y desafío. Con Luigi Galimberti, director de ArtePy (organización que otorga el premio Open Borders), y miembros del jurado, estamos conversando sobre el proyecto que voy a desarrollar. Con Valeria Gallarini y Laura Biaggioni, directoras de BGN/Arte, estamos ya proyectando la muestra del próximo año.

Juan Florenciáñez. Autorretrato, 2020. Collage digital. Cortesía

Perfil

Juan Florenciáñez (Asunción, 1992) es artista visual, diseñador gráfico, fotógrafo y maquillador, con estudios cursados en Argentina. Actualmente sigue la carrera de artes visuales en la FADA-UNA. Obtuvo el segundo puesto en el Premio Matisse 2016, ganó el Kryolan Diverse Beauty en 2017 y fue finalista del Adobe Design Achievement Awards 2017 y del Premio Hippolyte Bayard 2018.