Miembros de la comunidad cultural despiden al artista Bernardo Krasniansky

Anoche falleció Bernardo Krasniansky, figura relevante de la escena artística en Paraguay. Inició su formación artística a principios de la década de los 60 con los maestros Livio Abramo y Leonor Cecotto. En 1966 recibió una mención de honor en el primer Premio Internacional Tayi, en la galería del mismo nombre. En 1968 participó en la I Bienal de Medellín, en el Museo de Antioquia, en Colombia, y al año siguiente en la X Bienal Internacional de São Paulo. Participó en Prospectiva ’74, en el Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de São Paulo (USP).

Cursó la licenciatura en artes plásticas por la Escuela de Comunicaciones y Artes (ECA/USP) en 1975 y una licenciatura en educación artística por la Fundación Alvares Penteado (Faap) en 1977. En 1981 recibió el premio a la mejor exposición del año, otorgada por la Asociación de Críticos de Arte de São Paulo (APCA), por la exposición O Mito do Labirinto, en la Pinacoteca do Estado, en São Paulo. Al año siguiente fue premiado en el V Salón Nacional de Artes Plásticas, en el Museu Arte Moderna de Río de Janeiro (MAM / RJ).

El crítico de arte Ticio Escobar escribió en su cuenta Facebook, a propósito de la partida del  artista: “Cuando parte un gran creador su legado se despliega, por un instante, entero. La obra de Bernardo Krasniansky, recién partido, constituye un enorme conjunto de imágenes que reverberan a lo largo de toda la historia del arte moderno del Paraguay. Aparece en la década de los sesentas cuando, con voz propia, se suma con Ricardo Migliorisi al momento de transgresión y apertura que animaba entonces las artes visuales y las conectaba con otros quehaceres creativos. A partir de entonces todo su trabajo se dedicó con pasión, con meditada reflexión, a pensar, sentir y exponer su intenso mundo interior, la historia, el mundo, su país difícil. Como pocos, supo sintetizar la potencia de la expresión con la serena geometría del cálculo, la impaciencia de la imagen con el orden del concepto. Su mejor obra, copiosa, cultiva la forma estética tanto como atiende el severo compromiso poético; se deja seducir por la belleza sin dejar de mirar el abismo, con asombro, con inquietud, con audacia siempre. Acaba de partir Bernardo Krasniansky, Lito, enorme artista, amigo querido. Hace muy pocos días me envió desde Sao Paulo la imagen de esta obra suya. Una puerta potente, sugerente. Una puerta geométrica, exacta y bella como su obra. Una puerta abierta, quizá.”

Por su parte, la escritora  y crítica de arte Lia Colombino escribió en su perfil: “Lito querido. Esperaré siempre alguna broma, algún comentario tuyo. Aguzaré el oído para escucharte. Y siempre te voy a ver en la mirada que me devuelve este retrato colgado en mi casa”, en alusión a un retrato de su padre, Carlos Colombino, realizado por Krasniansky. 

Krasniansky, “La siesta”

“Adiós, Bernardo Krasniansky. Gracias por el tiempo sincero y generoso. Gracias por el don de los secretos, de los perfiles con edad impresos sobre la superficie deforme del presente. Gracias por ofrendarme los espejos de agua sobre los cuales quise verter palabras, como piedras”, expresó el escritor Damián Cabrera.

La Secretaría Nacional  de  Cultura hizo pública una nota que manifiesta cuanto sigue: “Un artista que se destacó con brillos propios en una generación de artistas plásticos innovadores, en especial dentro del grupo del Centro de Arte y Comunicación, es el que acaba de partir. Artista inquieto y experimentador, pionero en la creación de obras de arte con fotocopias, Bernardo Krasniansky fue creciendo en este camino de caminos, conquistando la atención de los más prestigiosos espacios de América y Europa. Actualmente se cuentan muestras (de su obra) en importantes colecciones del mundo, testimonio de su brillante trayectoria. Considerado un referente del arte contemporáneo de la región, residía en el extranjero desde hace algunos años –donde falleció–, sin cortar sus lazos con el medio artístico de nuestro país. La Secretaría Nacional de Cultura expresa su sentido adiós y su más alta valoración por el magnífico legado que deja este gran artista, sumándose a la comunidad artística de nuestro país.”