Rechazan fusión de IPS con Caja Municipal

En una movida que genera indignación y rechazo generalizado, la Asociación de Intendentes de Itapúa (AIDI), liderada por la cuestionada intendenta Blanca Chávez, propuso un proyecto de ley para que el Instituto de Previsión Social (IPS) absorba a la quebrada Caja de Jubilaciones y Pensiones del Personal Municipal. Esta insólita propuesta busca cargar al IPS, una institución que ya enfrenta serios desafíos de sostenibilidad, el peso de una entidad colapsada por años de mala gestión, desfalcos y falta de aportes por parte de los propios municipios.

Un perro muerto para el IPS

Pedro Halley, presidente de la Unión Nacional de Jubilados del Paraguay, calificó la propuesta como “llevar un perro muerto a la previsional”. En conferencia de prensa, Halley instó a las autoridades del IPS a oponerse con firmeza, calificando esta iniciativa como un peligro nacional. “El IPS no tiene por qué hacer de rueda de auxilio o salvavidas de otras cajas”, sentenció.

La indignación es compartida por los jubilados del IPS, quienes anuncian movilizaciones para frenar lo que consideran un atentado contra los aportes de los trabajadores del sector privado.

Proponen que el IPS absorba la Caja de Jubilaciones y Pensiones Municipales

Culpables y responsables: La quiebra anunciada de la Caja Municipal

La Caja Municipal está en quiebra técnica, con pagos atrasados a los jubilados y un agujero financiero que, según auditorías internas, asciende a más de G. 6.500 millones. Este desastre no es casual: la mala administración, encabezada por exdirectivos imputados por desfalco, y la irresponsabilidad de los municipios, de los cuales solo el 21% cumple con sus obligaciones de aporte, son las principales causas.

En Itapúa, la situación es aún más crítica: 24 municipios están en mora, y algunos ni siquiera pagaron lo correspondiente a enero. Ahora, los mismos responsables de este desastre pretenden transferir el problema al IPS, sacrificando los aportes de los trabajadores privados.

La defensa de lo indefendible

Blanca Chávez, presidenta de la AIDI y promotora de la propuesta, afirmó que la fusión es “viable” según sus asesores jurídicos, aunque no presentó un análisis financiero ni datos concretos sobre el impacto. Esta falta de sustento técnico ha encendido aún más las alarmas. Chávez, quien ya cuenta con antecedentes de irregularidades como “docente planillera”, declaró que la Caja Municipal está en un punto de no retorno y que “los aportantes no tienen esperanza de jubilarse”.

Sin embargo, los municipios de Itapúa son responsables directos del colapso al no cumplir con sus aportes, un hecho que Chávez convenientemente omite.

Reformas urgentes para salvar al IPS del colapso

Legisladores en la mira

El diputado cartista Germán Solinger, quien acompañó la presentación, se limitó a hablar de “buscar alternativas”, sin cuestionar el impacto negativo de la propuesta en el IPS. Su tibieza y la falta de un análisis crítico muestran la complicidad de sectores políticos en esta maniobra.

Un sistema en peligro

El IPS, que se mantiene superavitario gracias al esfuerzo de los trabajadores privados, enfrenta ya una carga considerable debido a su cuestionada gestión. Permitir que absorba una caja quebrada sería una sentencia de muerte para la previsional, condenando a sus aportantes a un futuro incierto.

La lucha por evitar el desastre

Los jubilados del IPS han declarado una alerta nacional, exigiendo que las autoridades rechacen categóricamente esta propuesta. “No permitiremos que se utilice al IPS como vertedero de malas gestiones”, enfatizó Gustavo Canatta, quien lidera la movilización prevista para los próximos días.

La indignación como motor de resistencia

La propuesta de fusionar al IPS con la Caja Municipal no es solo inviable; es inmoral. Intendentes irresponsables, que no cumplieron con sus obligaciones, ahora pretenden trasladar el costo de su ineptitud a los trabajadores privados. La ciudadanía debe mantenerse vigilante y exigir a los legisladores que rechacen esta maniobra que amenaza con desmoronar el sistema de seguridad social del país.

El IPS no es un salvavidas para los negligentes. Es hora de que los responsables enfrenten las consecuencias de sus acciones y de que los aportantes defiendan lo que con tanto esfuerzo han construido.