Además de Paraguay, solo Venezuela suspendió a la DEA por investigar al “Cartel de los Soles”

En un contexto de creciente tensión entre Estados Unidos y ciertos gobiernos de América Latina, dos países han decidido suspender la colaboración con la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA): Venezuela y Bolivia. Según declaraciones al canal NPY de Mike Vigil, exjefe de Operaciones Internacionales de la DEA, estas decisiones estarían relacionadas con investigaciones sobre narcotráfico que implican a figuras de alto rango en ambos países.

En Venezuela, la ruptura se dio luego de que la DEA señalara al “Cartel de los Soles”, presuntamente liderado por el presidente Nicolás Maduro y funcionarios de su círculo cercano, como Vladimir Padrino, ministro de Defensa. Tanto Maduro como otros altos cargos enfrentan acusaciones formales en Estados Unidos por su supuesta vinculación con el narcotráfico. Según Vigil, el gobierno venezolano expulsó a la DEA para evitar que continuaran las investigaciones que comprometen a la élite política del país.

Por su parte, Bolivia suspendió la cooperación durante el gobierno de Evo Morales. Vigil sostiene que la decisión se debió a la participación de varios políticos bolivianos en actividades ilícitas relacionadas con el tráfico de drogas. Morales justificó esta medida argumentando una supuesta intromisión extranjera y un uso político de la lucha contra el narcotráfico.

El patrón que se repite, según Vigil, es la alta corrupción en estos gobiernos. La presencia de la DEA representa una amenaza para estas figuras, ya que podría derivar en acusaciones internacionales y extradiciones a Estados Unidos, gracias a la colaboración con organismos como Interpol.

La suspensión de la DEA en estos países refleja las tensiones políticas y la lucha por el control del discurso sobre el narcotráfico, mientras el impacto real sobre esta problemática sigue siendo motivo de debate en la región.