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Opinión

¿Moverá la embajada estadounidense el avispero?

POR Martín Ramírez Machuca
Dr. en Lingüística, Lenguas, Filosofía, Educación y Didáctica. Universidad de Kiel, Alemania.

A finales del año pasado, la sociedad esperaba expectante las declaraciones del embajador de los EE. UU., Marc Ostfield, pues de la emblemática y poderosa embajada del país del Norte salían las declaraciones de “significativamente corruptos” o negación de entrada al país estadounidense, es decir, negar la visa a connotados referentes políticos de nuestro país.

Llegaron las elecciones, y uno de los  nombrados como “significativamente corrupto” llegó a la presidencia de la ANR y su candidato estrella logró la candidatura oficial por ese partido. El oráculo no se cumplió, puesto que se presagiaba que el “significativamente” no llegaría a ganar la conducción de la ANR ni mucho menos su “secretario”: el nuevo mote que la gente le ha puesto a Santiago Peña, quien ahora con sonrisa en los labios emerge como el mesías que cambiará la nación en cinco años.

Para muchos ha sido una verdadera decepción que esta dupla haya llegado tan lejos, a pesar de las declaraciones graves que el Gobierno de Joe Biden había hecho en contra de dos referentes esenciales de ambos movimientos de la ANR que estuvieron en pugna.

¿Qué pasó? La embajada se quedó callada y muda, ya no hay declaraciones como antes. Se pudo visibilizar de alguna manera que el Gobierno de Abdo Benítez descansó en la muy noble ayuda de los EE. UU. para combatir el narcotráfico y lavado de dinero en el país. La responsabilidad de encabezar esta limpieza, aparentemente, la dejó al representante de Tío Sam en el país.

Ahora, nuevo año, 2023 ya arranca lentamente, y el foco está en las elecciones generales de abril, pero la embajada sigue sin mover el avispero, excepto que hace unos días hubo un encuentro entre el embajador y el futuro fiscal general del Estado, quien muy pronto asumirá. Se espera que este nuevo fiscal tenga la llave de oro para “descajonear” los archivos de denuncias y otros hechos antijurídicos que  supuestamente descansan en las gavetas doradas de la Fiscalía.

Además de la entrevista con el futuro fiscal, también ha iniciado conversaciones con los candidatos a la presidencia: me pregunto si podrá entrevistarse con las 14 duplas que actualmente están en carrera.

¿Qué mensaje envía la embajada con esta reunión con el futuro fiscal y los candidatos principales? Pisando de nuevo el terreno que corresponde a las autoridades paraguayas y demostrando el poder que aún mantiene ese país del Norte en el nuestro y resto de los países latinoamericanos. ¿Les habrá dado consejos o directas orientaciones de cómo proceder en caso de llegar a la presidencia? Hay tantos interrogantes, pues no se ha filtrado el tenor de la conversación, por lo tanto,  esta situación se presta para fabricar una paleta de conjeturas.

Lo cierto es que el “significativamente” ya está instalado en su nuevo cargo y el candidato elegido oficialmente está feliz como una lombriz. ¿Cómo actuará la embajada en caso de que la dupla Peña-Alliana llegase al poder? Se infiere que esa ayuda que tanto pregona el embajador con su castellano exótico tendría alguna consecuencia positiva hacia lo que el pueblo está esperando, de no ser así, la reputación del viejo Tío Sam se vería en figurillas.

Paraguay aún no levanta cabeza en el sentido de tener aplomo y autoridad para controlar y ordenar su sistema político. En la hegemnonía del Partido Liberal ha habido algún atisbo de organización estatal, y en los 70 años de gobierno del Partido Colorado se ha tratado de desarrollar el país como se pudo y como las circunstancias políticas del  momento permitían.

¿Qué se ha hecho en estos 33 años de democracia? Se ha logrado, por lo menos, libertad de expresión, un acercamiento a la comprensión del concepto de libertad y de democracia, pero aún quedan grandes desafíos: la educación, la salud , la seguridad, desarrollo sustentable, mejor calidad de vida para la sociedad, entre otros.

Hoy estamos atados y pidiendo socorro a un país extranjero que solucionen nuestros problemas, porque los gobernantes que se han instalado como demócratas durante estas tres décadas han dado las espaldas al pueblo. Estos se han vuelto millonarios de la noche a la mañana y, en los últimos años, la mafia y el narcotráfico se han enseñoreado y han cooptado el control del país, por errores sistemáticos, estimo,  o quizás con manipulaciones de políticos antipatriotas y desleales hacia un pueblo sufrido.

Los siguientes cinco años que nos esperan serán peores que estos 10 últimos, pues  el candidato oficialista de la ANR había dicho en una entrevista en los medios que “Paraguay seguirá endeudándose”. ¿Qué pensamientos maquiavélicos habría detrás de esta amenazante declaración?

Mi oráculo personal me dice que en poco tiempo la embajada dejará el silencio y volverá a mover el avispero. El asunto en esto es saber si las avispas le picarán al embajador o hincarán sus aguijones a los declarados como significativamente corruptos.

*Correo electrónico: [email protected]

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