Paraguay conserva su dinamismo según el Índice de libertad económica 2025

El Índice de Libertad Económica 2025, elaborado por The Heritage Foundation, evalúa la libertad económica en 184 países, tomando como base cuatro pilares principales: estado de derecho, tamaño del gobierno, eficiencia regulatoria y apertura de mercados. América Latina refleja una amplia diversidad en cuanto a niveles de libertad económica, con marcadas diferencias entre países.

Paraguay

Paraguay ocupa la sexta posición en la región y el puesto 59 a nivel global con un puntaje de 65.2. La economía paraguaya se destaca por políticas fiscales estables, bajos impuestos y un sector agroindustrial dinámico que en suma le valieron el grado de inversión a mediados del año pasado. El crecimiento de la inversión extranjera también ha jugado un rol importante en los últimos años.

Perú se sitúa en la cuarta posición regional con un puntaje de 65.9 y el puesto 54 global. La economía peruana mantiene una trayectoria positiva gracias a un entorno que facilita la inversión privada. Panamá, con una puntuación de 65.5, ocupa el puesto 56 mundial, beneficiándose de su estabilidad financiera y su rol como centro logístico clave para el comercio internacional.

México se posiciona en el noveno lugar de la región con un puntaje de 61.3, situándose en el puesto 80 a nivel mundial. Sin embargo, aspectos como la inseguridad y la burocracia continúan limitando su competitividad económica.
Por su parte, Colombia ocupa la décima posición en Latinoamérica y el puesto 89 global, con un puntaje de 59.8. Obstáculos como las deficiencias regulatorias y la baja eficiencia judicial afectan negativamente su desempeño. Para atraer mayores inversiones, ambos países necesitan enfocarse en fortalecer la seguridad jurídica y reducir la corrupción.

Liderazgo Regional: Chile, Uruguay y por qué no Costa Rica

Chile lidera América Latina con un puntaje de 73.2, clasificándose como “mayormente libre” y ocupando el puesto 18 a nivel mundial. Este éxito se atribuye a políticas económicas consistentes y un entorno empresarial favorable, aunque enfrenta desafíos en la protección de los derechos de propiedad.

Uruguay se encuentra en el segundo lugar regional y puesto 29 global, con una puntuación de 70.2. Su estabilidad política y social, junto con instituciones confiables, han generado un clima ideal para la inversión y el desarrollo económico. Costa Rica, si bien no es un país sudamericano es una nación muy digna de admiración ya que a pesar de las adversidades de su bloque ostenta el cuarto lugar regional y el puesto 41 a nivel global con un puntaje de 68.6. Su enfoque en sostenibilidad y educación, acompañado de una estabilidad política destacable, ha sido fundamental para generar confianza en los mercados internacionales.

Los países rezagados en libertad económica

Haití, Bolivia, Venezuela y Cuba se encuentran en los últimos lugares del índice. Estos países enfrentan elevados niveles de intervención estatal y baja seguridad jurídica. Venezuela y Cuba ocupan las dos posiciones finales con puntajes alarmantemente bajos de 27.6 y 25.4 respectivamente. Sus economías altamente reprimidas, con escasa apertura al mercado, limitan significativamente las oportunidades de desarrollo y disminuyen la atracción para inversiones privadas.

La relevancia de la libertad económica

En términos generales, los países con mayor libertad económica tienden a atraer más inversiones, fomentar el empleo y promover el crecimiento sostenible. Factores clave como estabilidad política, eficiencia regulatoria y garantías sobre la propiedad privada resultan fundamentales para consolidar este progreso.

De cara a 2025, economías como Chile, Uruguay y Costa Rica continúan marcando una ruta hacia modelos más abiertos dentro de la región. Para mantener esta tendencia positiva, será crucial que los gobiernos refuercen sus instituciones e impulsen una mayor competencia en los mercados globales.