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Canasta familiar, cada vez más básica

El aumento de precios de los productos de la canasta básica sigue siendo una preocupación constante para los consumidores en Paraguay. En grandes supermercados y puntos de venta tradicionales como el Mercado 4, se han registrado incrementos significativos en alimentos esenciales, lo que ha obligado a muchas familias a modificar sus hábitos de compra.

Los datos recientes indican que entre los meses de febrero y marzo se han registrado alzas en productos como lechuga, pepino y zapallo, lo que ha afectado tanto a comerciantes como a consumidores. Además de las verduras, otros alimentos de consumo masivo, como queso, grasa de cerdo y huevos, han subido de precio, lo que genera incertidumbre en la población, especialmente ante la proximidad de la Semana Santa, cuando la demanda de ciertos productos tiende a aumentar.

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Ajustes en el consumo y preocupación en el comercio

Las familias paraguayas han tenido que reorganizar su presupuesto ante la suba de precios. Algunos consumidores han optado por reducir la cantidad de productos adquiridos, mientras que otros han buscado alternativas más económicas.

“Antes podía comprar más con el mismo dinero. Ahora tengo que reducir la cantidad o buscar productos más baratos”, comentó una clienta habitual del Mercado 4, quien expresó su preocupación por el constante aumento en el costo de vida.

Los comerciantes también han manifestado su inquietud por la situación. Aunque reconocen que los aumentos de precios afectan sus ventas, explican que muchos de estos ajustes se deben a factores externos, como el encarecimiento de insumos y costos de distribución.

“Nosotros también sufrimos con esto. No podemos seguir absorbiendo los aumentos de costos, pero los clientes ya no pueden pagar más. La situación es complicada para todos”, afirmó un vendedor de verduras.

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Incremento de precios en productos clave

Según datos de la Dirección de Comercialización del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), entre el 10 y el 14 de marzo se registraron subas en varios productos de la canasta básica.

Tomate Santa Cruz de origen argentino: pasó de G. 136.700 a G. 163.500 por caja (19,6% de aumento).

Tomate nacional: subió de G. 131.700 a G. 156.700 por caja de 20 kg (19% de aumento).

Huevo colorado de producción nacional: pasó de G. 13.200 a G. 14.800 por docena (12% de aumento).

Queso paraguayo: subió de G. 27.500 a G. 30.000 por kilo (9% de aumento).

En algunos comercios, la diferencia de precios entre mayoristas y minoristas es considerable. Mientras que el kilo de tomate cuesta alrededor de G. 7.850 en mercados mayoristas, en algunos puntos de venta llega hasta G. 15.000 por kilo, lo que representa un sobrecosto del 92% para el consumidor final.

En contraste con estas subas, algunos productos han mantenido o incluso reducido sus precios. El almidón, tanto en su versión granulada como refinada, se mantuvo en G. 7.000 por kilo, mientras que la harina de maíz bajó de G. 10.000 a G. 8.500 por kilo, con una reducción del 15%.

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El dólar y su impacto en el costo de vida

Otro factor que está afectando la economía doméstica es la cotización del dólar, que ha superado los 8.000 guaraníes en varias casas de cambio. Este incremento tiene un efecto directo en los precios de bienes y servicios, ya que muchos productos en Paraguay dependen de insumos importados.

El economista Víctor Raúl Benítez explicó que el dólar es una “mercadería” cuyo precio fluctúa según la oferta y la demanda en el mercado. La creciente demanda en países vecinos, como Argentina y Bolivia, ha impulsado su apreciación, además de factores externos relacionados con políticas económicas de Estados Unidos.

“Cuando sube el dólar, suben los precios de los productos importados, lo que impacta directamente en la inflación. Esto afecta más a la clase media y baja, que ve disminuido su poder adquisitivo”, señaló Benítez.

Asimismo, el economista expresó que las políticas monetarias del Estado han beneficiado a sectores exportadores y financieros, mientras que los consumidores enfrentan mayores dificultades para cubrir sus necesidades básicas.

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El contexto inflacionario y su evolución

La economista Martha Coronel destacó que la inflación en febrero fue superior a la del mismo mes del año anterior y que sigue un patrón estacional, con incrementos en productos y servicios relacionados con la educación, como útiles escolares, vestimenta, calzado, matrículas y cuotas.

Indicó que los bienes alimenticios, que ocupan una parte significativa de la canasta básica, siguen registrando aumentos, aunque algunos rubros, como tubérculos y hortalizas, han mostrado leves reducciones debido a factores climáticos que afectan la producción.

El Banco Central del Paraguay (BCP) proyecta una inflación anual dentro del 3,7%, aunque sectores económicos advierten que el impacto real en el consumo puede ser mayor, considerando el alza de los precios de bienes esenciales.

Perspectivas y desafíos

El panorama económico sigue siendo incierto. Los aumentos en los productos básicos, la depreciación del guaraní frente al dólar y el encarecimiento del costo de vida generan preocupación en la población.

Las familias paraguayas continúan ajustando sus presupuestos, mientras que los comerciantes intentan mantener sus ventas en un contexto de menor poder adquisitivo. Las próximas semanas serán clave para evaluar si las autoridades implementarán medidas para contener la inflación o si los aumentos seguirán afectando la economía doméstica.

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