Impacto de la suba del dólar en los bolsillos de los ciudadanos

La reciente escalada del dólar hasta alcanzar un nuevo pico histórico de G. 7.700 en la venta minorista ha generado preocupación en diversos sectores de la economía paraguaya.

La apreciación de la divisa estadounidense no solo impacta la inflación, sino también la dinámica de exportaciones e importaciones del país.

Para comprender mejor las causas de este fenómeno y sus posibles efectos en los bolsillos de los ciudadanos y la canasta básica, conversamos con el economista Manuel Ferreira, quien nos ofrece un análisis exhaustivo de la situación.

Para Ferreira, uno de los factores clave detrás de la apreciación del dólar es el comportamiento de las tasas de interés en Estados Unidos. A principios de año, existía una expectativa generalizada de una posible reducción en las tasas de interés.

Sin embargo, la inflación en EE.UU. mostró un incremento inesperado hasta marzo, lo que disipó estas expectativas. Aunque en abril se observó un ajuste y la inflación comenzó a descender, las expectativas de una disminución significativa en las tasas de interés se vieron reducidas.

Tasas de interés

Según el economista, las altas tasas de interés en EE.UU. tienen un doble efecto. Por un lado, atraen capitales internacionales, ya que los inversores buscan una buena remuneración en el país considerado financieramente más seguro del mundo.

Este fenómeno, descrito por Ferreira como un “efecto aspiradora”, provoca que el dinero fluya hacia EE. UU., reduciendo la cantidad de dólares disponibles globalmente y encareciendo la divisa estadounidense.

Factores en la economía local

Según Ferreira, a nivel local, el precio de la soja juega un rol crucial. Paraguay, que exporta un 70% de productos vinculados a la soja, ha visto una disminución en las exportaciones debido a la caída en los precios internacionales del grano.

Brasil, el mayor productor de soja del mundo, ha incrementado significativamente su producción, afectando los precios globales. La reducción en el volumen de exportación paraguaya y el consecuente menor ingreso en divisas han contribuido a la apreciación del dólar en el mercado local.

Ferreira destaca que el precio de la soja en el mercado internacional afecta directamente las finanzas del país. “Estamos exportando 500 mil toneladas menos que el año pasado, y eso, a pesar de que la producción no ha variado significativamente, impacta en la cantidad de divisas que ingresan al país”, explica el economista. Esta situación se traduce en un menor ingreso de divisas y una presión alcista sobre el dólar.

Manuel Ferreira Brusquetti.

El profesional explica que este aumento en la producción brasileña ha generado una presión sobre los precios de la soja, reduciendo el premio que reciben los productores paraguayos. Según Ferreira, los agricultores paraguayos están obteniendo aproximadamente USD 150 menos por tonelada en comparación con el año anterior.

La reciente escalada en la cotización del dólar tiene implicaciones significativas para la inflación y el costo de vida en Paraguay.

Según técnicos del Banco Central del Paraguay (BCP), el dólar ha apreciado en torno al 5% frente al guaraní desde enero, pasando de G. 7.290 a G. 7.700. Esta apreciación podría trasladarse a los precios de los bienes importados, que constituyen aproximadamente el 27,5% de la canasta básica de productos.

El impacto directo sobre la canasta básica se estima en torno al 1,15% o el 1,3%, según las proyecciones del BCP. Sin embargo, la presión alcista en el tipo de cambio podría persistir durante el segundo semestre del año, con proyecciones que sugieren una posible cotización de hasta G. 7.750 para el cierre del año.

“Si bien es difícil predecir con exactitud cómo evolucionará la cotización del dólar, la posibilidad de una disminución en la inflación en EE. UU. o una recuperación en el precio de la soja podría tener efectos positivos sobre nuestra economía. A medida que avanzamos hacia el final del año, es probable que enfrentemos una continua volatilidad en el mercado cambiario”.

“La clave estará en cómo estos factores globales y locales se desarrollen y cómo las políticas económicas nacionales puedan mitigar los impactos adversos”, concluyó Ferreira.