Contrabando de ganado vivo desde Formosa

El presunto contrabando de ganado vacuno en pie desde Formosa a través del lecho seco del río Pilcomayo con destino a Paraguay, sin cumplir con el pago de derechos de exportación ni emplear el tipo de cambio requerido, es tema de investigación por parte del juez federal de Formosa, Pablo Fernando Morán, según confirmó el magistrado a Infobae.

En las causas se siguen investigaciones con intervención de la Policía Provincial y Federal. Ya hay imputados por “contrabando de mercadería en pie”, entre los que se encuentran comisionistas y transportistas de hacienda.

“En Formosa tenemos una gran frontera con Paraguay de casi 800 kilómetros, buena parte de ella es fluvial y hoy por la sequía muchos puntos del río Pilcomayo dejaron una frontera seca que permite atravesar hacienda en pie, ya que se le hace bastante fácil a quienes pretenden contrabandear animales y arrearlos a través de dicha frontera”, explicó Morán.

“Esto sucede con animales de la Argentina que van con destino a Paraguay. Atento a la gran diferencia que exhibe el tipo de cambio a partir de los distintos tipos de valores para el dólar que hay en la Argentina, el productor agropecuario recibe un valor oficial bajo, a lo que se le restan las retenciones, y se produce una interesante diferencia en vender el animal directamente en efectivo en tierra paraguaya, donde se le paga en dólares y en dinero en efectivo”, señaló el juez.

Sequía

Según admitió el juez Morán, la fuerte sequía hace que en esta época del año la frontera con Paraguay sea “bastante permeable” para que se haga de manera “ilegal” el traspaso de animales y hasta granos de un lado al otro de la frontera.

Tal como se advirtió también desde el mercado de granos, hechos similares también se han detectado en envíos ilegales de cereales que se realizan desde la Argentina a países como Bolivia, con la correspondiente elusión y evasión impositiva y con una mejora en la diferencia que le proporciona el valor del tipo de cambio oficial respecto del pago en efectivo que reciben más allá de la frontera, sin cumplir con los pasos legales requeridos.

La investigación en curso cuenta con el apoyo de la Policía Federal y de efectivos de la Unidad Especializada en Asuntos Rurales de la Policía de la provincia de Formosa, que son quienes –junto a personal del Senasa- son los encargados de realizar los controles de los camiones jaula y el transporte de mercaderías en general que transita por las rutas nacionales y provinciales del distrito.

Según admitió el juez Morán, la fuerte sequía que en esta época del año aqueja a esta región y a gran parte de la Argentina hace que la frontera con Paraguay sea “bastante permeable” para que se promueva de manera “ilegal” el traspaso de animales y hasta granos de un lado al otro de la frontera. También sucede a la inversa, hecho que se está investigando, es el envío desde Paraguay de neumáticos que no cuentan con la respectiva homologación del INTI argentino y que ingresan para su venta en el mercado ilegal.

Modo de operar

En el caso puntual del ganado vacuno, muchos productores de la zona de Formosa e incluso Chaco o Corrientes, venden de buena fe animales para invernada en campos de Argentina y terminan siendo faenados en frigoríficos de Paraguay, y luego vendidos en góndolas o carnicerías del vecino país. Así el magistrado consignó que se detectaron casos de novillitos que sin la terminación que se refieren en la documentación para su transporte, tienen como destino final su faena del otro lado de la frontera.

Para Morán, este tipo de hechos pueden ser “tipificados como contrabando de exportación” y consignó que ya hay personas “imputadas” por el transporte de ganado que se hacía en camión por la ruta 86 y, luego de su descarga, se procedió a arriar el ganado a través de la frontera seca para ingresarlo en la República de Paraguay. “Esto sería contrabando de exportación de mercaderías, en este caso de animales en pie o hacienda vacuna”, aseveró a este medio.

Por ello, desde la justicia argentina se detectó el tránsito bovino de animales que tenían como destino invernada, y sin embargo, los vacunos pasaron a referir la categoría de “gordos” para ser faenados en Paraguay, sin la correspondiente documentación ni pago de impuestos para cumplir con su exportación. Dicha mercadería debería tener como destino el mercado argentino y sin embargo terminó en comercios minoristas de Paraguay. Para aquellos que dispusieron este “tránsito ilegal”, además de evitar el pago de retenciones, se ven beneficiados por el cobro de un dólar billete, evitando así la facturación que debe hacerse valor que reviste el dólar oficial.