Los 4 errores de forma del anteproyecto de ley que facilita triangulación

El borrador de proyecto de ley que impulsan los importadores en detrimento del modelo industrial tiene algunos errores de forma como:

1- No hay mecanismos de control seguros: El proyecto señala que podrán coexistir actividades amparadas en el presente régimen, con otras ajenas al mismo. Sin embargo, en ninguna parte del texto se lee un mecanismo serio de aseguramiento de no aplicación del régimen a actividades que no reúnen todos los presupuestos para el beneficio y que, por tanto, están gravadas con los demás impuestos (Impuesto al Valor Agregado, Impuesto Selectivo al Consumo) y aranceles aduaneros.

2- El abordaje de los controles sanitarios es por demás superficial: El proyecto carece de una mención expresa a los controles del Instituto Nacional de Alimentación (INAN) y de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (Dinavisa), que son obligaciones cuyo cumplimiento se exige a todos los sujetos del régimen de importación convencional. Existe una mención muy superficial del tema en el artículo 10, que consideramos insuficiente, dada la relevancia de este tema. Tratándose de temas de salud pública los que están implicados en este punto, no pueden dejarse a la libre interpretación de los órganos de aplicación.

3- Contribuirá al aumento de la economía informal: El proyecto hace una mención apenas declarativa sobre la prohibición de que mercaderías acogidas al régimen sean comercializadas a connacionales, salvo su previa nacionalización a través del pago de impuestos. Sin embargo, insistimos, no se leen mecanismos efectivos de aseguramiento del control y sanción.

4- Tendrá efectos en el ámbito del Mercosur: Ante el hecho de que los que estén bajo el régimen normal deban para el ANV y el IVA, genera las condiciones propicias para que los demás miembros del Mercosur sientan posturas más duras respecto a los regímenes especiales, por el hecho de vender productos de extrazona sin aranceles y sin IVA. También debe ser considerado el efecto intangible respecto a que en el Paraguay los productos de frontera no pagan impuestos.

“En cuanto a las auditorías y los sistemas de trazabilidad que establece el proyecto, no creemos que tengan por objetivo ni por resultado el combate a la informalidad que se profundizará con este régimen, además las auditorías son exigencias tributarias hoy vigentes”, señalan desde la UIP.