Francisco Pérez-Maricevich en el recuerdo

POR Victorio Suárez *

El 15 de setiembre de 2022, con mucho pesar, la Academia Paraguaya de la Lengua Española anunciaba el fallecimiento de Francisco Pérez-Maricevich, uno de sus más distinguidos integrantes que, en ese entonces, apenas terminaba de ofrecernos su último libro, Junta de voces (Editorial Rosalba). El gran escritor había cumplido los 85 años y dejaba un legado preponderante para la literatura paraguaya y universal.  En ese sentido, en esta nota creo significativo recordarlo con afecto y respeto, más aún llevando en cuenta que lo conocí en su faceta de periodista y escritor en aquellos difíciles años castigados por el autoritarismo brutal.

Un escritor en la prensa

En el año 1970, cuando las páginas culturales del diario ABC Color se hallaban a cargo del poeta, periodista y médico Roque Vallejos, el descubrimiento de la vida literaria resultó fascinante para mí. Al terminar las clases del colegio solía visitar la redacción para colaborar con mis poemas que fueron apareciendo en esas páginas dominicales tan apreciadas por su alto valor cultural. En una de esas incursiones conocí a Francisco Pérez-Maricevich, quien en ese entonces ejercía una de las jefaturas del prestigioso diario.

Pasaron los años y con Francisco solíamos encontrarnos en esos eventos culturales tan cuidadosos, audaces y abundantes que sirvieron para enfrentar de alguna manera al criminal sistema autoritario que imperó en Paraguay por casi 35 años.

Ya después de 1977 y con la conformación del “Taller de Poesía Manuel Ortiz Guerrero”, los contactos se hicieron más cercanos con los intelectuales de diversas promociones literarias. En ese contexto, Francisco Pérez-Maricevich apareció como un maestro, un amigo, un crítico riguroso, exigente y hasta temido por muchos intelectuales, conste que su crítica rotunda nunca sirvió para destruir a nadie. Escucharlo en las tertulias era un verdadero placer. Francisco tenía una voz sobria y un conocimiento literario que parecía inconmensurable. Él representó a la Promoción del 60 y, si bien fue un magnífico e inagotable poeta, su calidad se expandió hacia la narrativa y el ensayo, géneros donde expuso sus ideas para nutrir de símbolos la literatura paraguaya tan vapuleada por el ostracismo y la persecución.

Un hombre generoso

Recuerdo que la primera edición de mi libro Proceso de la literatura paraguaya contiene un prólogo donde Francisco Pérez-Maricevich realizó una alusión precisa y contundente sobre el material. Fue un largo derrotero recorrido con el maestro. En ese panorama de viejas incertidumbres, creo que la literatura unió a las generaciones y, hermanados, nos constituimos en voces enérgicas contra las injusticias, los atropellos y la infamia. Todas las promociones literarias exhibieron sus mejores voces y el respeto fue vital.

Tras la caída del sistema represivo aquello continuó sin retrocesos y, si bien la clase política se empeñó en un berenjenal despreciable de pujas, arrinconamientos, odios reprimidos, estocadas venenosas y falacias insuperables, los escritores resistieron y siguieron con el aporte incólume de sus trabajos, todos trataron de pintar con cierta decencia el camino copado por los esbirros del poder, los que se incorporaron luego y una clase política opositora débil para responder ante los desafíos.

Con Francisco Pérez-Maricevich, el académico, el escritor y amigo, solíamos hablar de todo lo que ocurría, teníamos poca fe en la suerte del país, pero seguíamos empuñando como arma la palabra, las ideas y esa lucha sin cansancio que deseaba acampar en sitios de luz para beneficio de la patria y su historia.

Los últimos tramos con el maestro

En el año 2022, con motivo del reconocimiento que le brindó la Sociedad de Escritores del Paraguay, hablamos con preocupación sobre la situación del país, la violencia, la falta de respeto, la mediocridad educativa y la falsedad despreciable de la clase política. Caminando nos perdimos en esos pasillos de la Feria Internacional del Libro (Asunción-2022) y creo que el diálogo sirvió para fortalecer nuestras convicciones de seguir sin renunciar a la palabra, de cara a la realidad, sin desmayos para ver las cosas de la vida. Hoy, a un año de su partida, no olvido su fulgurante sabiduría y empeño de ver un país mejor.

Perfil

Francisco Pérez-Maricevich (Asunción, 1937-2022) fue poeta, escritor, ensayista, crítico literario, catedrático y periodista. Fue académico de número de la Academia Paraguaya de la Lengua Española (APARLE), socio fundador de la Sociedad de Escritores del Paraguay. Egresado de la carrera de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Fue integrante de la Promoción del 60 y aportó importantes trabajos literarios y de investigación sobre el bilingüismo español-guaraní. Desarrolló una tarea inmensa en diversos periódicos de Paraguay a través de la dirección de los suplementos culturales. Se mostró siempre como un hombre generoso con las nuevas promociones de escritores, a quienes nunca negó un espacio en la prensa.

En el 2021, en la Colección Académicos, de la APARLE, publicó su último libro, Junta de voces (Editorial Rosalba), donde toca con excelentes recursos exterioristas aquellas circunstancias variables, mitológicas e históricas del Paraguay. Sin ninguna duda, este material confirma su brillante trabajo y su plena vigencia en el tiempo. Otras publicaciones fueron: Axil (1960), Paso de hombre (1963), Coplas (1970), Los muros fugitivos (1983). En género narrativo: El coronel mientras agonizo (1966); Memoria de Pascual Ruiz (1998), su primer libro de cuentos.

También presentó su novela corta La septicorde lyra (2013) y El tablón que oscila (2015). Su tarea literaria se extendió hacia el campo ensayístico, donde presentó La poesía y la narrativa en el Paraguay (1969), Pequeño diccionario de literatura paraguaya (1980), Breve antología del cuento paraguayo (1969), Los fuegos de la noche (1985), Panorama del cuento paraguayo (1996) y Mitos y leyendas del Paraguay (1998). Dejó más de 40 libros. El Congreso Nacional lo distinguió en el año 1996. Asimismo, recibió el galardón de “Maestro del Arte”, otorgado por el Centro Cultural El Cabildo (2016). Fue un potente poeta y un crítico literario de aguda inteligencia. Su capacidad de análisis es verdaderamente ponderable.

* Victorio V. Suárez es poeta, periodista, ensayista, escritor. Es académico de número de la Academia Paraguaya de la Lengua Española (APARLE) y director y fundador de la Revista Arte y Cultura. Fue presidente de la Sociedad de Escritores del Paraguay (SEP).